jueves, 19 de marzo de 2020

Somos unos vivos murientes

A los zombis los llaman muertos vivientes, y nosotros somos eso, vivos físicamente pero muertos humanamente.
En realidad me pregunto cúando hemos sido eso que nosotros llamamos "humanos", porque esas cualidades superiores que nos autoatribuimos son menos frecuentes que el sentido común.
Con toda esta situación del confinamiento por el coronavirus nos empeñamos en las redes sociales en autoconvencernos de que somos graciosos, buenos y positivos ante la situación, pero yo veo a diario tantas pequeñas vilezas y mezquindades que no me cabe duda de que en una situación de mayor emergencia la vecina, la compañera de trabajo, la amiga, me pisotearían por conseguir un rollo de papel del culo "para los suyos".

No nos autoengañemos más, somos una especie egoísta y ruin por naturaleza, o mejor dicho, tal vez en los inicios de la civilización, cuando vivíamos en tribus, nos cuidáramos desinteresadamente unos a otros, pero en el devenir de la historia y particularmente con el capitalismo nos hemos vuelto peores que el animal con peor fama (inmerecida).

Vamos a los supermercados a acaparar comida "pa mí" y que se jodan los que llegan después, me pongo una mascarilla innecesariamente porque YO YO YO no quiero contagiarme y los que realmente trabajan expuestos que se mueran si se quedan sin suministro.
Si toso un poco ya voy corriendo al centro de salud porque no vaya a ser que YO YO YO tenga el virus, y a los sanitarios que me atienden y a los otros enfermos de la sala de espera que les den y que se mueran mientras a mí no me pase nada.

Fácil es hacer la pantomima del puto aplauso en el balcón aprovechando para que nos de el fresco y saludar a los vecinos y cotillear, pero a la hora de comportarse cívicamente y tratar con amor y respeto a nuestro sistema de salud todos los días de todos los años no tenemos tanto entusiasmo.

No, nos extinguirá el coronavirus, nos extinguirá nuestra naturaleza voraz y egoísta, seremos un día esos muertos vivientes que vagan por las carreteras devorando lo que pillan, nos mataremos los unos a los otros porque ya lo estamos haciendo en gestos simbólicos y cotidianos.