lunes, 15 de mayo de 2017

La reina Dido de Cartago

Thy hand, Belinda, darkness shades me,
On thy bosom let me rest,
More I would, but Death invades me;
Death is now a welcome guest.

Tu mano, Belinda; la oscuridad me envuelve.
En tu seno déjame descansar.
Más quisiera, pero la muerte me invade;
La muerte es ahora una bienvenida visita.

When I am laid, am laid in earth, May my wrongs create
No trouble, no trouble in thy breast;
Remember me, remember me, but ah! forget my fate.
Remember me, but ah! forget my fate,

Cuando yazga, yazga en la tierra, que mis errores
no causen cuitas a tu pecho; 
Recuérdame, recuérdame, pero ¡ah! olvida mi destino. 
Recuérdame, pero ¡ah! olvida mi destino;


"Dido's Lament" es el nombre de la famosa aria de la ópera Dido y Eneas escrita por Henry Purcell, con el libreto de Nahum Tate. También se le llama "When I am laid in earth" (Cuando yazca en la tierra).
El héroe troyano Eneas deja la ciudad de Cartago a pesar del amor compartido con la reina Dido. Ella, sabiendo que no puede vivir sin Eneas, decide suicidarse inmolándose en una hoguera. Irónicamente, el camino que toma el barco de Eneas es iluminado por el fuego. Dido dice sus últimas palabras a su leal doncella, Belinda, antes de morir.
Dido, fundadora y primera reina de Cartago, en el actual Túnez, su fama se debe principalmente al relato incluido en la Eneida del poeta romano Virgilio. Era hija del rey de Tiro, Matán I, también llamado Belo. Dido tenía dos hermanos: Pigmalión, que heredó el trono de Tiro, y la pequeña Ana.
Huidos de una patria arrasada, los troyanos llegan a Cartago desviados de su rumbo hacia Italia a causa de la tempestad provocada por la diosa Juno. Allí los recibe la reina  Dido, a quien Eneas solicita hospitalidad.Venus ,madre del héroe, para que ésta acceda y no lo traicione, envía a Cupido con la misión de que la enamore de Eneas. Dido había jurado mantenerse fiel a su difunto marido Siqueo, pero nada puede hacer alentada por su hermana Ana y rendida por la intervención de Cupido (que se sienta en su regazo adoptando la forma de Ascanio ,hijo de Eneas, para poder clavarle sus flechas).

A instancias de Juno, Venus acuerda con ella propiciar que Dido y Eneas se casen y reinen juntos en Cartago. Juno así lo desea por el rencor que arrastra contra los troyanos desde el famoso Juicio de Paris y la Guerra de Troya (de este modo se vengaría consiguiendo que Eneas nunca llegue a fundar la que en el futuro será la gloriosa estirpe romana). Venus, sabiendo cuál es el verdadero destino de su hijo, finge aceptar el trato para que los favores de Dido allanen el reavituallamiento de la flota troyana. Así pues, Juno manipula los acontecimientos para que en Cartago se organice una cacería, durante la cual desata una tormenta que obliga a Dido y a Eneas a cobijarse en una cueva. Esa noche hacen el amor, momento a partir del cual se hacen amantes. Ante el retraso que ello ocasiona, Júpiter envía a Mercurio para que le recuerde a Eneas que no son esos los designios del hado, sino que debe partir hacia Italia. El héroe, pese al dolor que le ocasiona, obedece la voluntad divina y deja Cartago. Tremendamente desconsolada y ofendida, Dido intenta olvidarlo con ayuda de su hermana, pero no puede. Es por eso que decide suicidarse maldiciendo el abandono de Eneas. Desde ese momento comienza el histórico odio de Cartago hacia Roma.

En el posterior capítulo VI de la Eneida, cuando Eneas desciende al inframundo griego con ayuda de la Sibila de Cumas, la encuentra vagando por los Prados Asfódelos, entre los muertos por amor. Comprendiendo entonces que la reina había cometido suicidio a su partida, trata de explicarle con gran pesar que él no quería abandonarla, que los dioses habían labrado así su destino. Pero el fantasma de Dido parece no poder escucharle y continúa su absorto camino tras la sombra de Siqueo.



Sin embargo, además de lo que aparece en la Eneida, hay otra versión acerca de la muerte de Dido. En la versión clásica, Eneas quiere desposarla, pero Dido es todavía fiel al recuerdo del difunto Siqueo. Creyendo que si rechazaba a Eneas éste tomaría represalias contra ella y su gente, acepta, pero el día de la boda, antes de celebrarla, Dido se hunde un puñal en el pecho. Éste sería el modelo de los sacrificios que los cartagineses ofrecerían en el tofet. Por esto la muerte de Dido se relaciona con la figura mitológica del Fénix, que muere en el fuego para renacer de sus cenizas. Así nace el odio por Roma. Tras su muerte fue venerada como una divinidad.
En cualquier caso, la reina y fundadora de una potencia como Cartago queda en el recuerdo como la amante de Eneas, no respetamos su deseo al morir "remember me but forget my fate".
Su recuerdo es el de la amante doliente y despechada que sin el hombre no puede vivir, no el de la poderosa  reina de la poderosa nación. Se perpetúa el rol de la heroína subordinada al personaje principal masculino, que aunque ostente un papel destacado en la sociedad sólo desempeña un rol de amante dependiente del hombre.
Dido, debiste mandar detener a Eneas y a los suyos y evitar que una nueva nación falocéntrica como Roma se crease. Debiste vivir y reinar gloriosa por encima de los demás.

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