Elizabeth Eleanor Siddall Rossetti (Londres, 25 de julio de 1829 - 11 de febrero de 1862), conocida también como Lizzie Siddall, fue una poeta, artista y modelo británica, retratada a menudo por los artistas de la Hermandad Prerrafaelita y especialmente por su esposo, el pintor Dante Gabriel Rossetti.
Lizzie era capaz de leer y escribir, suponiéndose que sus padres le enseñaron. Desarrolló un amor por la poesía a una temprana edad, luego de descubrir un poema de Alfred Tennyson en un trozo de papel de periódico que había sido utilizado para envolver una porción de mantequilla; este descubrimiento inspiró a Lizzie para comenzar a escribir.
Siddal, cuyo nombre era originalmente escrito Siddall (fue Rossetti quien eliminó la segunda "l"), fue descubierta por Deverell en 1849 mientras trabajaba como modista de sombreros en una tienda de Cranbourne Alley, Londres. Ni ella ni su familia tenían aspiraciones o intereses artísticos. Fue empleada como modelo por Deverell y a través de él fue presentada a los prerrafaelitas. A sus veinte años, su alto y delgado cuerpo y cobrizo cabello la convirtieron en una de las primeras modelos "góticas" prerrafaelitas. En el principio de su carrera como modelo, se le permitía seguir trabajando en la sombrerería a medio tiempo, asegurándose así un salario regular incluso si el modelaje no funcionaba. Esta era una oportunidad inusual para una mujer de su tiempo. William Michael Rossetti, su cuñado, la describió como "una de las criaturas más bellas, con un aire entre dignidad y dulzura con algo que excedía la modestia y la autoestima y poseía una desdeñosa reserva; alta, finamente formada con un cuello suave y regular, con algunas características poco comunes, ojos verde-azulados y poco brillantes, grandes y perfectos párpados, una tez brillante y un espléndido, grueso y abundante cabello oro-cobrizo."
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Ofelia, de Millais |
Elizabeth Siddal fue la principal musa de Dante Gabriel Rossetti en la mayor parte de su juventud. Después de conocerla, la pintó constantemente, excluyendo así a casi todas las otras modelos y evitando que ella posara para los otros prerrafaelistas. Estos dibujos y pinturas culminaron con Beata Beatrix, pintada en 1863, un año después de la muerte de Elizabeth. Ella muerta tal como la encontró fue la modelo para dicho cuadro, que muestra a la Beatriz de Dante Alighieri orando en éxtasis.
Rossetti la empleó como modelo desde 1853 sobre todo para sus cuadros de Dante y Beatriz, pero lo más numeroso y personal fueron bocetos a lápiz de ella en casa, comenzados en 1852 cuando se mudó con él a Chatham Place. La historia de amor entre Siddal y Rossetti fue bastante tumultuosa, actualmente se le consideraría una relación “tóxica”, llena de infidelidades, celos, manipulación, y promesas inconclusas. Desde ese momento se volvieron más antisociales, pasando el tiempo juntos encerrados embebidos en su amor y su arte. Como ella procedía de la clase trabajadora, Rossetti temía presentarla a su familia. Sus hermanas la criticaban duramente y este conocimiento de que no sería aprobado por su familia le hizo ir posponiendo el matrimonio. Además, Siddal empezó a sospechar que él quería reemplazarla por una musa más joven, lo que era en parte verdad, lo que contribuyó a empeorar su enfermedad y sucederse los momentos depresivos.
Después de comprometerse con Rossetti, empezó a estudiar con él. También pintó un autorretrato, que difiere de la belleza idealizada por los prerrafaelitas. Es significativo porque muestra cómo se veía a través de sus propios ojos, no idealizada. En 1855, el crítico de arte John Ruskin comenzó a patrocinar su carrera y le pagaba 150 libras al año por todos los dibujos y pinturas que realizara. Ella produjo numerosos bocetos y acuarelas, así como algunos óleos, que presentan los temas propios del prerrafaelismo con ilustraciones de las leyendas artúricas y otros temas medievales idealizados. También comenzó a escribir poesía, que fue bien recibida por la crítica. Tanto Rosseti como Ford Madox Brown la apoyaban y admiraban.
Un par de años después, Siddal renunció a la beca de Ruskin ante el agobiante control que sentía por parte del pintor y las complicaciones de salud y trabajo a las que se enfrentaba. Usando sus ahorros, viajó a Sheffield, el lugar de nacimiento de su padre, y se inscribió en la Escuela de Arte decidida a convertirse en artista por su cuenta. Siddal, harta de las infidelidades que aumentaron bastante cuando se mudó, terminó con la relación con Rossetti en 1858. Posteriormente, enfermó gravemente en la primavera de 1860. Su familia contactó a Ruskin y este avisó a Rossetti, quien se apresuró a estar con ella. Siddal y Rossetti se casaron el miércoles 23 de mayo de 1860 en la iglesia de Saint Clement en la ciudad costera de Hastings. No hubo familiares ni amigos presentes, y actuaron como testigos solo un par de personas encontradas en la ciudad. Durante los años anteriores ella había viajado a París y Niza por su salud, y al momento de la ceremonia estaba tan frágil que tuvo que ser llevada a la iglesia, a pesar de encontrarse a solo cinco minutos de donde se hospedaban.
Al finalizar su luna de miel, Lizzie se dio cuenta de que estaba embarazada, Rosetti inmortalizó esta etapa en su melancólico cuadro Regina Cordium. Ella estaba feliz, encantada con la maternidad, pero no pudo controlar su adicción al láudano, su hija nació muerta un 2 de mayo de 1861. La modelo cayó en una profunda depresión y su relación con Rossetti empeoró debido a las sospechas de sus frecuentes infidelidades.
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Regina cordium, Rosetti |
A finales de año había vuelto a quedarse embarazada, pero a los tres mese, el 10 de febrero de 1862 cuando Rossetti salió a dar su clase nocturna en el Working Men’s College vio que Lizzie había tomado su dosis habitual de láudano, dejando la mitad de la botella llena, pero al regresar descubrió la botella vacía junto con una nota suicida. Rossetti no pudo despertar a su esposa, murió al siguiente día; Lizzie tenía 32 años. Aunque la muerte fue declarada accidental, casi seguro fue un suicidio. Hay sugerencias de que Rossetti encontró una nota suicida y, consumido por la pena y el remordimiento, fue a ver a Ford Madox Brown, que le ordenó quemarla, ya que el suicidio entonces era inmoral, ilegal, habría traído el escándalo a su familia e impedido su entierro en un cementerio.
Antes de ser enterrada en el cementerio de Highgate, Rosetti escondió junto a su esposa en el ataúd un cuaderno con la única copia de sus poemas inéditos. En los años siguientes, Rosetti empezó a tener problemas en la vista y temía quedarse ciego. Empezó a obsesionarse con desenterrar su poesía y publicarla. Finalmente, él y su agente literario Charles Augustus Howell consiguieron un permiso de exhumación en 1869 para poder recuperar el cuaderno. Rosetti no se atrevió a estar presente y Howell le mintió asegurándole que el cuerpo de Elizabeth estaba intacto e incluso su cabello rojo había crecido y llenado el ataúd. Varios poemas estaban casi ilegibles, con las hojas roídas por los gusanos. A pesar de ello, los publicó junto con algunos nuevos en 1870.Los poemas recuperados fueron publicados y gozaron de un enorme éxito, él guardó el secreto de su procedencia durante muchos años.
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Autorretrato, Elizabeth Siddal |
Al igual que el resto de los prerrafaelitas, pintaba a menudo temas medievales y también escribía poemas que fueron publicados después de su muerte. Son poemas tristes, donde se habla de la inconstancia y fracaso del amor: “If the merest dream of love were true/ Then, sweet, we should be in heaven,/ And this is only earth, my dear,/ Where true love is not given” (“Si al menos el sueño del amor fuera cierto, entonces, querido, estaríamos en el cielo, y ésta es sólo la tierra, donde no existe el verdadero amor”). En varios de ellos ruega al cielo por su muerte y la anticipa: “Then sit down meekly at my side/ And watch my young life flee” (“Entonces siéntate dócilmente a mi lado y observa cómo huye mi corta vida”).
El cuadro más famoso para el que posó Siddal es la Ophelia de Millais. El personaje shakesperiano se confunde con Siddal en su locura, su belleza y su trágica muerte. Para pintarlo, Siddal tuvo que posar en invierno, en una tina, durante horas. Debajo había unas lámparas que calentaban el agua, pero que en cierto momento se apagaron y Siddal, sin quejarse, se fue enfriando poco a poco y se enfermó. Parte del impacto del cuadro es esta combinación tan perturbadora entre la belleza y la muerte. Quizás parte del realismo se deba a que la modelo casi muere de hipotermia. Su padre creía que Millais era responsable y lo forzó a pagar una indemnización para pagar al doctor. Se pensó que sufría de tuberculosis, pero algunos historiadores actualmente creen que es más probable que haya sido un malestar intestinal. Otros han sugerido que ella podría ser anoréxica, mientras otros atribuyen su pobre salud a una adicción al láudano o una combinación de ambos.
Elizabeth representa la historia de muchas mujeres de su época, todas las artistas que pasaron a la historia casi invisibles, casi desaparecidas. La obra de Elizabeth, sus deslumbrantes pinturas, merecen más atención que su personaje. Este reconocimiento, quizás, haría descansar al fantasma que atormentaba a Rossetti.
https://es.wikipedia.org/wiki/Elizabeth_Siddal
https://diariofemenino.com.ar/lizzie-siddal/
https://culturainquieta.com/es/arte/pintura/item/11510-la-historia-de-elizabeth-siddal-musa-pintora-y-fantasma.html